Por Juan Tomás Valenzuela
Supe de un barco pirata
cargáo de peledeístas,
que de manera anarquista
están fuñendo la data.
Si no remenean la mata
desde el Gobierno Central,
ni Abinader, ni Fulcar,
ni el mismo médico chino,
nos librarán del destino
al que nos van a llevar.
Los ataques cibernéticos
están a la orden del día
y claro, se suponía,
por un proceso patético,
que aunque apoyado en lo ético,
no logra enmendar errores
al preservar malhechores
de regímenes pasados,
que aún pululan el Estado,
muchas veces, por favores.
Dormir con el enemigo
y gente de malas mañas,
le pasó factura a Faña
y hoy enfrenta su castigo.
Por eso yo no me ligo,
que lo sepa el presidente,
con ningún “exdirigente”
que de manera agorera
venga a cosechar, de afuera,
lo que sembró nuestra gente.
Es un error, de cualquiera,
dejar a estos marsupiales
dirigir Redes Sociales
a esta claque bandolera.
Los que aún estamos afuera
(y no lo digo por mi)
somos lo que junto a Luis
nos quemamos las pestañas,
para que estos malas mañas
sigan drenando el país.
Secuestran los Discos Duros,
traspapelan los papeles,
siguen librando las mieles
y los míos pasando apuros.
Yo no sé si es un conjuro
que tienen con Lucifer,
pero quien ganó el poder,
transpirando sucio y grajo,
son los que aún están abajo.
¡Sacúdase, Abinader!.
Juan de los Palotes
27 enero 2021